


En las “atípicas” protestas de migrantes en Los Ángeles, colectivos de activistas han identificado que, a partir de las imágenes que han circulado sobre los actos, se demuestra que “fue un acto montado”, con la participación de personas infiltradas, “para deslegitimar el movimiento migrante”.
Aun así, reconocieron que las protestas son cada vez más frecuentes. Tan sólo de enero al 10 de junio de este año se han registrado, según sus informes, 189 manifestaciones de parte de la comunidad migrante, 12 veces más comparadas con las 16 del año anterior.
Al conversar con La Razón, Conchita Walker, activista y periodista en Colorado, comentó que este 14 de junio, mil 500 organizaciones saldrán por la vía pacífica a defender sus derechos y coincidió con otros de sus compañeros en que lo de Los Ángeles fue “atípico”.
“Nunca en la historia reciente se habían registrado hechos de estos comportamientos, pero, ¿es verdad que quienes hacen esas pintas son migrantes o es alguien mismo dentro de este gobierno que quiere deslegitimarnos”, cuestionó, al referirse a la persona que aparece en las imágenes con patrullas incendiadas y enarbolando la bandera mexicana, lo que ha permitido construir la narrativa de invasión a Estados Unidos.
“¿Un migrante sin documentos se arriesgaría a salir a quemar una patrulla o a ondear su bandera? Es ilógico, si lo que ahorita todos hacen es esconderse. Las imágenes son ultra profesionales, mandadas a hacer y compartidas por altos funcionarios de Trump”, apuntó.
Al respecto, el activista migrante Manuel Castro Revueltas y el activista Antonio Villegas dijeron, a través de un buzón ciudadano, lanzaron un llamado a no caer en provocaciones porque se avizora un difícil panorama rumbo al 14 de junio, cuando se prevén protestas en todo el país, y coincidieron en que Donald Trump intentará, desde todos los frentes, deslegitimar el movimiento migrante, que se ha caracterizado por ser pacífico.
Las manifestaciones contra los operativos antimigrantes en Los Ángeles eran pacíficas; sin embargo, agentes que se infiltraron provocaron el desorden, aseguró el director de la Coalición por los Derechos Plenos de Inmigrantes, Juan José Gutiérrez.
“La gente salió a protestar pacíficamente, pero las provocaciones de que fueron víctimas, por parte de agentes provocadores infiltrados pagados para generar violencia, generaron actos violentos, destrucción de propiedad y agresiones físicas”, afirmó.
Luego de que el presidente Donald Trump anunció el sábado 7 de junio el despliegue de 2 mil miembros de la Guardia Nacional de California, sin contar con la aprobación del gobernador del estado, que es quien dispone de estas tropas, lo que supone la primera vez en 60 años que el Ejecutivo estadounidense se impone de esta forma, en redes sociales y en foros migrantes se ha “regado como pólvora” que los hechos registrados en aquel país suponen varias interrogantes.
El líder comunitario migrante Sergio Infanzón también coincidió con los colectivos referidos y dijo que alguien pudo tener un acercamiento previo con los agitadores de la violencia registrada el fin de semana pasado en Los Ángeles, aunque no descartó la posibilidad de que actúen por su cuenta.
Reconoció que, si bien es cierto que en la comunidad latina, principalmente los mexicanos gozan de cierto nacionalismo, “en este panorama sería difícil saber si fueron ellos, pues la mayoría están encerrados y no se arriesgarían de esa forma.
CSP: Van 61 mexicanos detenidos en las redadas
› Por Yulia Bonilla
A seis días de iniciadas las redadas en Estados Unidos contra migrantes, ya van 61 mexicanos aprehendidos por las autoridades de dicho país.
En su conferencia de prensa, la Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, comentó que ya van 61 connacionales trasladados a los centros de detención y con los cuales el personal consular ha entrado en contacto, particularmente en Los Ángeles.
La mandataria acotó que también ha habido detenidos por los disturbios en las protestas, entre los cuales no solamente ha habido mexicanos sino de otras nacionalidades.
“Por cierto, hay que decir, porque de esta situación hay detenidos no solamente mexicanos, hay de otras nacionalidades y también muchos estadounidenses”, dijo.
Un día antes, al rendir el informe sobre las detenciones, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Juan Ramón de la Fuente, pidió a los connacionales guardar la calma, pues recordó que personal consular se estará desplegando para asistirlo.
Entre las recomendaciones emitidas, sugirió a los paisanos que en caso de ser detenidos tienen derecho a guardar la calma, no firmar nada que no entiendan y también pueden solicitar la presencia de personal para que se les brinde la información que requieran.
Necesitamos mantener la calma, necesitamos que todas las expresiones que se hagan sean pacíficas.
“Y por la vía legal, vamos a encontrar las mejores salidas para todas y todos ellos. La instrucción es clara y la hemos cumplido cabalmente, señora Presidenta: Agotaremos las vías legales y diplomáticas para defender los derechos de cada una y de cada uno de nuestros connacionales que se vean amenazados. En eso está la red consular y a eso nos hemos dedicado de manera intensiva en estos últimos dos días”, dijo.
Toque de queda divide a comunidad migrante
› Por Claudia Arellano
El toque de queda en el centro de Los Ángeles dividió a la comunidad migrante en Estados Unidos, pues mientras algunos creen que es una mala imagen para quienes se han manifestado por sus derechos, otros creen “que, ante la violencia, no había de otra”.
Para la activista Janet Arellano esto puede resultar una buena medida para “aplacar un poco los ánimos; venga de donde venga la agresión, son necesarias las medidas para prevenir algo mayor. Sin embargo, esto repercute en la economía local, en LA hay muchos comercios nocturnos y esto no pinta bien en ese aspecto ni en la imagen del movimiento”.
La abogada migrante recordó que la alcaldesa de LA, Karen Bass, “aún no ha definido cuánto tiempo permanecerá en vigor el toque de queda, aunque se prevé que se extienda por varios días, posiblemente hasta que pase el 14 de junio, fecha del cumpleaños de Donald Trump, cuando se prevén varias manifestaciones”.
Aunque la funcionaria dijo que no se trata de un método de censura a las protestas, sino que busca detener la violencia, para la activista “ese no sería precisamente el mensaje de esta aplicación”.
Los mismos migrantes sospechan de infiltrados en el movimiento, tras las protestas que persisten en medio de grupos no identificados que se niegan a dispersarse.
Javier Calzada, líder de defensa migrante en EU, señaló: “No estamos de acuerdo con toda esta tensión que están viviendo los compañeros migrantes en esa zona, la mayoría son mexicanos, no sé si se sepa, pero muchos de ellos en esa zona trabajan por la noche, por la área en que ellos habitan, estas medidas no son favorecedoras para ellos”.
“Trump está echando leña al fuego. Reclutar la Guardia Nacional de un estado sin consultar al gobernador es ilegal e inmoral, y esta dañando mucho a la comunidad que ha sostenido tanto este país”, dijo.
Calzada llamó a los mexicanos en esa ciudad, a conservar la calma ante esta embestida, e incluso, a “guardar físicamente” y de momento, la bandera mexicana que ha sido durante mucho tiempo un elemento central en las manifestaciones relacionadas con la inmigración, especialmente en Los Ángeles.
Dijo que aunque tiene profundos vínculos culturales y económicos con México, Los Ángeles, capital de la diáspora mexicana en EU, debe estar preparada para estar hipervigilada y señaló que los más de 3.4 millones de personas de ascendencia mexicana o nacidas en en nuestro país que viven en ese condado, serían los primeros atacados, ya que “es el lugar donde México está más vivo que nunca”.
“Si es necesario, guarden sus banderas, no hay que darles motivos. A mí me tocó ver gente que no estaba identificada en ningún movimiento salir, con capuchas, gafas, lentes, botas y vandalizar, haciéndose pasar como parte de nosotros, y no lo vamos a permitir. Nosotros estamos rumbo al 14 de junio en una vía pacífica, si piden toque de queda, respetemos, eso, nosotros hemos dado siempre ejemplo de educación, de ser un buen pueblo”, dijo.
Calzada recordó que el jefe del Departamento de Policía de Los Ángeles, Jim McDonnell, indicó que los residentes de la zona de impacto estarán exentos del toque de queda. Otros exentos incluyen periodistas acreditados, personal de seguridad pública y de emergencias, y personas sin hogar, sin embargo, señaló “ahora es mejor preservar lo más valioso, la seguridad y la familia”.
Trump intensifica control militar ante protestas por redadas migratorias
› Redacción
El presidente Donald Trump ha profundizado su política de inmigración con el despliegue de más de 4,800 efectivos de la Guardia Nacional y 700 marines en la ciudad de Los Ángeles. La medida, presentada como una estrategia para garantizar la seguridad durante las redadas migratorias y controlar las crecientes protestas, ha generado una fuerte respuesta de alcaldes, líderes comunitarios y legisladores, quienes acusan a la Casa Blanca de provocar miedo y de utilizar tácticas autoritarias.
Las redadas comenzaron el pasado viernes y ya han resultado en más de 400 detenciones. Según datos oficiales, dos de cada tres personas arrestadas no contaban con antecedentes penales. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, denunció que las acciones fueron “provocadas por la Casa Blanca” y señaló que el despliegue militar representa una “escalada drástica, caótica y completamente innecesaria”. Aseguró que los disturbios han sido aislados y no justifican el nivel de militarización impuesto, agregó: “Quizás seamos parte de un experimento nacional para medir hasta dónde puede intervenir el gobierno federal en una jurisdicción local”.
Presencia de marines. Las contradicciones entre los distintos niveles de gobierno se agudizaron cuando el sheriff del condado de Los Ángeles, Robert Luna, admitió no tener certeza sobre la presencia efectiva de marines en la ciudad: “Estaría adivinando si intentara responder a eso”, dijo al ser cuestionado. Por su parte, el mayor general Scott Sherman, responsable de coordinar el despliegue, aclaró que los marines aún no han sido enviados a patrullar las calles, pero confirmó que “pronto estarán allí” para funciones de contención, sin portar munición real y sin autoridad para realizar arrestos, aunque podrán efectuar detenciones temporales hasta que intervenga la policía local.
Mientras tanto, el Comando Norte de Estados Unidos informó que hay más efectivos desplegados en Los Ángeles que en las zonas de guerra de Irak y Siria. Esta revelación ha intensificado el debate sobre el uso del ejército en suelo estadounidense. Los líderes demócratas Chuck Schumer y Hakeem Jeffries defendieron al gobernador Gavin Newsom por rechazar el despliegue militar: “Ha demostrado que no se dejará intimidar por Trump”, declaró Schumer.
MÁS MovilizaciONES. El rechazo se ha extendido a varios alcaldes del sur de California. Arturo Flores, alcalde de Huntington Park y ex infante de marina, hizo un llamado a los soldados a recordar que “estos son estadounidenses. Con o sin papeles, están tratando con estadounidenses que buscan sobrevivir, no con enemigos”. En tanto, organizaciones civiles convocaron a nuevas marchas para el fin de semana, incluido el evento “Sin Reyes”, como contrapeso al desfile militar planeado por Trump en Washington.
La tensión no se limita a California. En Texas, el gobernador Greg Abbott ordenó la activación de la Guardia Nacional ante posibles manifestaciones en San Antonio. A diferencia de Los Ángeles, el despliegue en Texas fue solicitado por autoridades municipales. Abbott declaró que “Texas no tolerará la anarquía que hemos visto en California”. Sin embargo, el alcalde de San Antonio aclaró que no había solicitado el apoyo militar, lo que añade otro elemento de contradicción entre niveles de gobierno.
A su vez, los fiscales generales de 19 estados respaldaron legalmente la decisión del presidente Trump de federalizar la Guardia Nacional sin el consentimiento del gobernador. En su argumento, señalaron que la autoridad presidencial prevalece cuando los intereses nacionales lo exigen, especialmente en situaciones de insurrección o rebelión.
Desde la Casa Blanca, la secretaria de prensa Karoline Leavitt defendió la legalidad del despliegue militar y evitó responder si los soldados pueden realizar arrestos. También afirmó que “los líderes locales deben hacer más”, en referencia a Bass y Newsom, a quienes acusó de usar discursos políticos en lugar de tomar acciones contundentes.
El ambiente en Los Ángeles, sin embargo, ha sido mayormente pacífico, pero con ocasionales episodios de violencia. Las protestas de ayer reunieron a más de 400 personas en el centro, donde la marcha incluyó expresiones culturales, como un baile tradicional mexicano frente al Ayuntamiento. A pesar del toque de queda impuesto desde las 8 p.m., la música y los llamados a la solidaridad marcaron la jornada.
Las contradicciones también alcanzaron al propio mayor general Sherman, quien inicialmente afirmó que miembros de la Guardia Nacional habían realizado detenciones durante protestas. Más tarde, rectificó sus declaraciones, indicó que su percepción se basó en imágenes no verificadas. Aún así, confirmó que 500 efectivos han sido entrenados para participar en operativos migratorios.
Según cifras del Departamento de Policía de Los Ángeles, sólo el martes pasado se arrestaron a 203 personas por no dispersarse y a otras 17 por violar el toque de queda. Mientras la Guardia Nacional sigue desplegada y lista para actuar. En tanto, Trump afirmó en un evento en el Centro Kennedy: “Si no hubiera actuado rápidamente, Los Ángeles estaría en llamas ahora mismo”.
En su red Truth Social, Donald Trump atacó al gobernador Gavin Newsom, tildándolo de incompetente por no haber actuado “a tiempo”. A su vez, varios líderes demócratas en el Congreso reforzaron su respaldo a Newsom y aseguraron que defiende la democracia y el equilibrio de poderes frente a un uso excesivo de la autoridad presidencial, que no ha respetado el derecho a la manifestación.