Gustavo Adolfo Guerrero Gutiérrez, titular de la Fiscalía General Justicia del Estado de Nuevo León, presentó su renuncia al cargo este martes luego de permanecer más de cuatro años al frente de la dependencia.
Mediante un documento enviado al Congreso local, Guerrero Gutiérrez indicó que da “un paso a un lado» para abrir la puerta a nuevos retos profesionales y nuevas generaciones, retirándose con la «satisfacción del deber cumplido».
“Por este conducto, aprovecho para extender a ustedes un afectuoso saludo, así como para someter a consideración de esta soberanía mi renuncia al cargo de Fiscal General de Justicia del Estado de Nuevo León»
Gustavo Adolfo Guerrero, fiscal de Nuevo León
La renuncia, señala la misiva, es parte de su proceso de jubilación tras haberse desempeñado por más de 40 años como servidor público en Nuevo León, “siempre en pro de la justicia y el Estado de Derecho”.
Cabe recordar que Adolfo Guerrero aceptó ser fiscal de dicha entidad el 9 de marzo de 2018 ante el Congreso local, cargo que habría ocupado por seis años, hasta 2024.
Mientras tanto, la Fiscalía de Nuevo León no se ha pronunciado públicamente respecto a la renuncia de Guerrero Gutiérrez y no se sabe quién lo sustituirá en el cargo.
Cabe recordar que Gustavo Adolfo Guerrero fue criticado por el manejo del caso Debanhi Escobar Bazaldúa, joven de 18 años desaparecida desde el pasado 9 de abril cuyo cuerpo fue localizado en la cisterna del motel Nueva Castilla en el municipio de Escobedo, Nuevo León.
Los señalamientos contra la Fiscalía de Nuevo León y su titular se desataron porque, en principio, sostuvieron que la joven cayó accidentalmente en la cisterna y había muerto por ahogamiento, versión refutada luego de tres autopsias al cuerpo de Debanhi.
Tras la tercera necropsia, se determinó que la causa de muerte de Debanhi fue asfixia por sofocación, asesinada días después de su desaparición.
