La reina Isabel II de Reino Unido se vio obligada a cancelar todos los eventos de gran escala en sus residencias del Palacio de Buckingham y el Castillo de Windsor por el resto del año debido al brote de coronavirus, dijo este jueves el palacio.
“Se analizaron una variedad de posibilidades para ver si era posible que las investiduras se llevaran a cabo de manera segura de acuerdo con las recomendaciones”, dijo el Palacio de Buckingham en su página web, en referencia a las ceremonias que se realizan cuando un miembro de la familia real entrega a alguien un reconocimiento en persona.
“Lamentablemente, debido a la gran cantidad de invitados y beneficiarios que asisten, no fue posible encontrar una manera de celebrar estos eventos de manera segura en las actuales circunstancias”, agregó.
La reina de 94 años planeaba regresar este mes al Castillo de Windsor, al oeste de Londres, y usar el Palacio de Buckingham solo para audiencias y compromisos más pequeños, en línea con las recomendaciones y consejos sanitarios.
Isabel se ha visto forzada a cancelar varios eventos por el virus este año, incluida la tradicional ceremonia de conmemoración de su cumpleaños en abril.