La actriz ha pasado de ser una de las celebridades más queridas a una persona no grata en redes sociales. Todo comenzó con la promoción de la película 𝙄𝙩 𝙀𝙣𝙙𝙨 𝙬𝙞𝙩𝙝 𝙐𝙨, en la que los fans notaron que Justin Baldoni, director y protagonista de la cinta, no posó junto a Blake ni el resto del elenco en los diferentes eventos promocionales de la película.
Este gesto desató un rumor que fue tomando cada vez más fuerza: Lively, productora ejecutiva de la cinta, y Justin tuvieron diferencias creativas durante las grabaciones y finalmente la actriz tomó el control en postproducción, algo que molestó a Baldoni.
De acuerdo con diferentes portales, al actor le molestó la forma en la que Blake “frivolizó” un tema tan importante como la violencia doméstica, incluyendo en la promoción una entrevista cómica junto a su esposo, Ryan Reynolds, quien promocionaba al mismo tiempo 𝘿𝙚𝙖𝙙𝙥𝙤𝙤𝙡 𝟯, y quien ayudó a Blake a retocar al guion un par de veces.
La actriz también aprovechó el estreno de la cinta para promocionar su nueva línea de tintes para el pelo y centró su atención en los looks florales que llevó durante la gira de prensa, algo que tampoco fue bien recibido por algunos internautas y por lo que volvió a recibir comentarios negativos.
Ante las críticas y rumores que rodeaban a la película, Baldoni habría contratado a Melissa Nathan, relacionista pública que representó a Johnny Depp durante su juicio contra Amber Heard, para reducir el impacto negativo en su imagen.
Poco después de esto, resurgió una entrevista de Blake Lively del 2016 con la periodista Kjersti Flaa en la que no sale bien parada: contestó molesta a la felicitación que le hizo por su embarazo y después decidió ignorarla por el resto de la plática. Para algunos, esta es la muestra de la verdadera personalidad de la actriz, y para otros, es una campaña publicitaria que busca perjudicarla. #QuéOpinas