La pausa que Estados Unidos hizo a las exportaciones de ganado mexicano ante la intromisión del gusano barrenador es parte de un protocolo de sanidad y se resolverá esta semana, aseguró la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Expuso que hasta ahora solo se tiene identificado un caso de contaminación y éste se identificó gracias a las medidas de inspección en el ganado que entra al país.
“No sé si se llama plaga, pero hay esto que se llama gusano barrenador; se ponen cinturones de salida para evitar que haya contaminación de ganado que viene naturalmente por la frontera sur. Entonces, cuando uno va ahí y transporta ganado, se hacen las pruebas, se revisan, y gracias a este cerco sanitario, se encontró a un ejemplar que, en efecto, estaba contaminado”, comentó.
Recalcó que la pausa anunciada por Estados Unidos únicamente es una medida cautelar.
“Esperamos que esta semana se resuelva esta discusión. Pero eso es algo que es parte de nuestro protocolo que se hizo”, dijo.
Ganaderos piden cerrar frontera sur
El sector pecuario nacional demandó al Gobierno federal el “cierre inmediato” de la frontera sur a las importaciones de ganado, con el fin de combatir y evitar el contrabando proveniente de Centroamérica que, además, exacerbe la amenaza de entrada de más animales vivos contaminados.
Uno de los llamados provino de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG), la cual advirtió que el pasado 7 de noviembre pidió públicamente a la administración federal, a través de su convención semianual, la medida preventiva.
El peligro del contacto del gusano barrenador es que su larva, considerada peligrosa, se alimenta de carne viva de animales de sangre caliente como ganado y mascotas, que tiene el potencial de provocar infecciones y, en consecuencia, pérdidas económicas en la ganadería.