MÉXICO.
Al estilo de Babe Ruth, quien presagió uno de sus famosos cuadrangulares en plena Serie Mundial, Fernando El Toro Valenzuela pronosticó, aunque como una broma ante sus compañeros de los Dodgers, el único juego sin hit ni carrera que lanzó en las Grandes Ligas frente a los Cardenales de San Luis, hace exactamente 30 años.
Todo comenzó a dos mil 500 millas de Los Ángeles, en otro país y a media hora de que los Dodgers iniciaran su partido. En Toronto, Canadá, Dave Stewart, un poderoso lanzador que había sido compañero de Valenzuela en los Dodgers en el título de la Serie Mundial de 1981, era ya un pitcher estelar con los Atléticos de Oakland.
El diestro completó el doble cero en la victoria de 5-0 sobre los Azulejos, acciones que fueron seguidas desde un televisor en el clubhouse de los Dodgers.
Bueno, ya vieron uno en televisión, ahora van a ver uno en vivo”, dijo Fernando Valenzuela a sus compañeros antes de salir a calentar al bullpen.
La peculiar anécdota fue revelada por el propio manager de los Dodgers, Tommy La Sorda, al término del encuentro del 29 de junio de 1990, mientras que El Toro aceptó que “lo hice bromeando”. A lo que el experimentado manager le respondió: “sí, pero sucedió, así que fue una predicción bastante buena”.
Lo cierto es que el zurdo sonorense, quien había batallado desde dos temporadas atrás por una lesión en el hombro izquierdo, salió inspirado aquella calurosa noche de verano en el Dodger Stadium para completar una hazaña más en su ilustre trayectoria con una imagen inusual al portar anteojos dorados tipo aviador, que por un corto tiempo lució en la loma.
Fue la primera ocasión en la historia moderna de las Grandes Ligas que se lanzaron dos juegos sin hit ni carrera en el mismo día y la primera vez con pitchers de ambas ligas.
Valenzuela y Stewart fueron los héroes de aquella jornada, que además fue la primera doble cartelera que transmitió la cadena deportiva ESPN a nivel nacional en los Estados Unidos.
Ambos lanzadores tuvieron situaciones en común más allá de ser compañeros con los Dodgers. Los últimos bateadores que eliminaron para completar el doble cero fueron dominicanos: Tony Fernández, de los Azulejos de Toronto, y Pedro Guerrero, de Cardenales de San Luis.
Como parte del equipo angelino, Valenzuela y Stewart fueron testigos del sin hit ni carrera que les tiró Nolan Ryan en el Astrodome en la temporada 1981.
Pero el dato más significativo es que ambos lanzadores portaron el famoso 34 en sus franelas en aquella jornada memorable de hace tres décadas