Francia reportó un marcado repunte en casos confirmados de coronavirus, con más de mil nuevos contagios el jueves, debido a que la población bajó la guardia rumbo a las vacaciones de verano en el país.
Las autoridades de sanidad señalaron que los casos en Francia continental han aumentado 66% en las últimas tres semanas, con un alza de 26% tan sólo en la última semana. Las preocupaciones sobre un incremento de contagios de antemano había llevado al gobierno francés a hacer obligatorio el uso de mascarillas en todos los espacios públicos al aire libre esta semana.
En su actualización diaria de contagios de COVID-19, el cual ha cobrado la vida de 30 mil 182 personas en Francia, las autoridades de salud afirmaron que la población no está respetando tanto el distanciamiento social y que «nuestros hábitos recientes han favorecido la propagación del virus por varias semanas».
«Durante el verano y los periodos feriados, podría parecer artificial guardar la distancia unos de otros al momento de saludarse, mantenerse distanciados al conversar, lavarse las manos con regularidad y utilizar mascarillas en espacios cerrados. Pero este esfuerzo individual y colectivo es crucial para evitar que el virus pisotee nuestra libertad y que la epidemia repunte», advierten.
