Jugadores y entrenadores de los Utah Jazz y los New Orleans Pelicans se arrodillaron este jueves para protestar contra el racismo durante el himno estadounidense, previo al primer partido de la reanudación de la temporada de la NBA.
Los basquetbolistas, con los brazos entrelazados, portaron camisetas negras con el lema “Black Lives Matter” (La vida de las personas negras importa), que también está grabado en el centro de la cancha sin espectadores del complejo deportivo de Disney World (Orlando).
Justamente, el sindicato de jugadores había reclamado antes del reinicio de la actividad poder realizar este tipo de protestas sin correr el riesgo de ser multados o sancionados por sus franquicias, como había sucedido tiempo atrás en otros deportes como en la NFL.
El gesto de hincar la rodilla, popularizado por el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick, se ha convertido en uno de los símbolos de las manifestaciones por la igualdad racial y el fin de la brutalidad policial que han tenido lugar en Estados Unidos y otros países durante los últimos meses. Los jugadores de la NBA han preparado muchos otros gestos y actividades para sus reivindicaciones, entre ellos la retirada de sus nombres de las camisetas y su sustitución por mensajes en favor de la justicia social.