


Los Dodgers de Los Ángeles conquistaron su segundo campeonato en cinco temporadas al reponerse de un déficit de cinco carreras con la complicidad de tres fallos defensivos de los Yankees, sometiendo el miércoles 7-6 a Nueva York para sentenciar la Serie Mundial en cinco juegos.
Elevados de sacrificio de Gavin Lux y Mookie Betts en el octavo inning completaron la remontada en el Yankee Stadium.
Estos Dodgers jugaron con un fervor sin límites, decididos a sacarse de encima las frustrantes eliminaciones en la primera ronda contra San Diego y Arizona en los últimos años. Fueron fiascos que empezaron a crear la impresión de que eran una nueva versión de los Bravos de Atlanta, el club que apenas pudo ganar un título en la década de los 90 pese a quedar habitualmente primeros en su división durante la temporada regular.
Los Dodgers se han clasificado a los playoffs en las últimas 12 campañas, 11 como campeones de la División Oeste de la Liga Nacional, nueve de ellas con Dave Roberts como mánager.
El juego estuvo dedicado a 34 de Fernando Valenzuela con el numero 34 que los jugadores portaron